Bale puja por quedarse en Madrid, en el Getafe

Garet Bale terminó su contrato con el Real Madrid y él club lo despidió como una leyenda, pero el jugador quiere seguir jugando al fútbol y prefiere hacerlo en la capital española. A él, su esposa y sus hijos les gusta el lugar donde viven ahora y harán todo lo posible por quedarse.

Una vez libre de su acuerdo con el Real Madrid, Bale y su representante, Jonathan Barnett, se sentaron a pensar en su próximo destino. Analizaron todas las opciones y tomaron muy en cuenta que la capital de España tiene otros tres clubes en primera división: Atlético de Madrid, Rayo Vallecano y Getafe.

Bale, a pesar de algún desencuentro con la afición blanca, no iría al Atlético. Es una leyenda del Real y mudarse al campo del gran rival no quedaría bien, y menos en él, a quien no le gustan los grandes retos, eso de mostrarse rebelde con su afición, que le grite o le aplauda, pero eso no. 

También sabe el bueno de Garet que con el entrenador del Atlético; Diego Simeone, no hay medias tintas. Con el Cholo hay que implicarse, sí o sí, ganarse el puesto cada día aunque luego él no te ponga a jugar ni un minuto. Grandes jugadores que pasaron por el Vicente Calderón, otrora, y por el Wanda Metropolitano, después, tuvieron que hacer las maletas porque no convencían al técnico.

A Bale le quedaban dos opciones: Rayo Vallecano y Getafe. Y su representante fue a ver al presidente de este último, Ángel Torres, a quien la propuesta de que Bale juegue para el equipo que entrena Quique Sánchez Flores le cayó de maravillas.

No todos los días te encuentras un jugador del nivel de Bale que quiera jugar en un club humilde como el Getafe, y eso hay que estudiarlo y tomarlo en consideración. Este año Bale fue el segundo futbolista mejor pagado de España, por detrás del barcelonista Gerard Piqué, con cifras que superan los los dos millones al mes. Una salvajada y más de lo que debe ganar toda la plantilla del Getafe.

Bale sabe que en el Coliseum Alfonso Pérez no se acercarán a ese salario, ni mucho menos, pero las partes pueden llegar a un acuerdo, porque tanto el jugador como el club están concientes de lo que hay detrás de esa decisión y qué pueden ganar uno y otro con un maridaje temporal.

El Getafe encontraría, como por arte de magia, a un jugador al que nunca podría comprar. Un futbolista que parece de cristal por las continuas molestias que lo sacaron de las convocatorias del Real Madrid un día sí y otro también, pero un futbolista determinante, tranquilo, que prefiere como entretenimiento el golf, y que quiere estar muy cerca de su casa y de su familia.

Pero sobre todo, tendrá, en caso de llegar a un acuerdo, a un jugador motivado, que querrá llegar en forma a la Copa Mundial de Qatar, prevista para noviembre y diciembre próximos, a un buen goleador, muy veloz en carrera y con un golpeo maravilloso del balón.

Bale, por su parte, no tendrá que dejar Madrid. Puede seguir en su casa y no alejarse de su familia, que prefiere las comodidades de la capital de España, donde se sienten todos muy a gusto. Y encontrará un equipo para trabajar intensamente y competir al máximo nivel hasta el Mundial, incluso más allá.

Las condiciones del contrato hipotético tal vez nunca las conozcamos, pero el galés puede seguir jugando al fútbol y darle al Getafe lo que tal vez no le dio al Real Madrid en sus últimas tres temporadas de blanco. Y, de paso, podría ganar un salario cerca de los tres millones de euros, que tampoco está nada mal para quien viene de retorno de una carrera con cifras astronómicas.

Ángel Torres comentó muy emocionado la conversación con el agente de Bale. Dijo que lo hablaría con la junta directiva y con el entrenador y que después decidirían, pero si el jugador quiere y el técnico también, y, sobre todo, se ven capaces de sacarle provecho, Bale se quedara en Madrid y jugará en el Getafe.

El jugador le dará caché al equipo y puede que más cosas, porque es una bestia del fútbol, que atraviesa un mal momento, en coincidencia con sus últimos años, pero siempre decían desde el interior de su anterior que era un fenómeno en los entrenamientos, tanto física como técnicamente.

El Galés es un ídolo en su país. Logró, con el brazalete y con un gol, clasificar a la selección nacional a la Copa Mundial, e hizo lo mismo a las dos últimas ediciones de la Eurocopa. Y no se conformará con el boleto a Qatar, sino que querrá más: ir más allá de la fase de grupos, por ejemplo.

Ser el capitán de Gales motiva y por llegar al Mundial en forma, Bale escogió el Getafe. Ojalá ambas partes lleguen a un acuerdo mutuamente ventajoso. A ambos, a la Liga Española y al fútbol en general le vendría bien un maridaje de ese tipo. Y yo creo que es posible.