Feminidad, encanto, gracia. Estas palabras pueden describir a la corredora alemana Alice Schmidt. Conozcamos a la chica que se ha convertido en un auténtico icono de belleza en el mundo del deporte.
Alice Schmidt nació el 8 de noviembre de 1998 en la ciudad alemana de Ingolstadt. Se inició en el atletismo a los 6 años.
Sus padres la llevaron a la sección de atletismo. A la niña le gustó el nuevo pasatiempo. A la edad de 11 años, Alice se dio cuenta de que quería correr distancias cortas: 200, 400 y 800 metros.
Schmidt se hizo un nombre por primera vez cuando ganó la plata en el relevo 4 x 400 en el Campeonato de Europa Sub 20 en Italia. El siguiente logro de la atleta alemana fue el bronce en el relevo de 4 x 400 m con el equipo alemán.
Eso es todo por ahora de los premios. Pero no olvides que Alice solo tiene 22 años. Los Juegos Olímpicos de Tokio serán los primeros en su carrera. Esta es una gran oportunidad para que la corredora se muestre a sí misma a los demás. Especialmente cuando hay algo que mostrar.
A pesar de la falta de títulos y premios serios, Alice ya ha logrado el amor mundial y una gran popularidad. La revista australiana Busted Coverage nombró a Schmidt como la atleta femenina más sexy del mundo en 2019. Y, ¿quién puede discutir contra eso? Las facciones bonitas, el cabello rubio, los abdominales marcados y los ojos color cielo hicieron su trabajo. ¡Nadie puede resistirse a una belleza tan encantadora!
El título honorífico de la atleta más sexy le dio a Alice no solo fama mundial, sino también un aumento significativo de la audiencia en Instagram. Ya tiene 1,8 millones de seguidores en su cuenta. En la red social, la atleta publica fotos de entrenamientos y viajes. Alice logró visitar Bali, Abu Dhabi y Tenerife. También promueve un estilo de vida saludable y fitness.
Alice usa sabiamente su nueva popularidad. Siguiendo al gran corredor Usain Bolt, se convirtió en embajadora de la marca deportiva PUMA. Schmidt también colabora con marcas de cosmética, una cadena de hoteles e incluso con el Borussia Dortmund. ¡Y esto no es nada sorprendente! Con una apariencia tan atractiva, puede anunciar cualquier cosa y tanto como quiera.
Alice protege su vida personal como la niña de sus ojos. Solo se sabe que está saliendo con un joven llamado Richter, quien también está relacionado con el ámbito deportivo.
Alice tiene un sueño preciado: "Mi tarea es convertirme en una atleta popular, y no en una modelo de moda debido a mi apariencia". Le deseamos éxito a la corredora alemana en los Juegos Olímpicos de Tokio. Además, este es su sueño de la infancia. ¡Y los sueños deben hacerse realidad!